TF: Intentar escapar por la ventana a la calle para que nadie te vea
From Furry Aventuras
Por suerte vives al nivel del suelo y tu habitación tiene una ventana que da a un callejón que suele estar casi siempre vacío. Sabes que desde allí podrás moverte sin que la gente te vea, a pesar de no saber aún exactamente a donde debes ir.
Estas vestido tan solo con el pijama con el que te despertaste y a pesar de ser invierno no notas demasiado frío gracias a tu nuevo y eficiente pelaje moteado que te protege de las bajas temperaturas y también de otras condiciones meteorológicas. Por primera vez te das cuenta de lo que supone tener un cuerpo de guepardo y quedas maravillado por el tacto de las almohadillas de tus patas sobre el suelo, de lo que se siente al tener una cola y aprender a moverla conscientemente. También percibes que sobretodo tu oída y tu olfato son ahora mucho más agudos y eres más consciente de todo lo rodea.
Sin embargo toda esta exploración de tus nuevas habilidades queda interrumpida cuando escuchas el grito de una niña de cinco años que está asomada al balcón de una de las casas que dan al callejón y exclama:
"¡Mamá! ¡Mamá! ¡Mira! ¡Hay un guepardo en la calle!"
Sabes que tienes poco tiempo antes de que llegue la madre y tienes que tomar una decisión rápidamente.
